Una de los destinos más atrayentes de la isla de Sicilia es la ciudad de origen griego de nombre Siracusa, fundada allá por el siglo VIII a. C . Ubicada más al sur de la isla tiene muchos sitios de interés y visitas turísticas.

Es una ciudad agradable, acogedora, sorprendente … y entre los sitios más increíbles destacamos la preciosa isla de Ortigia y el Parque Arqueológico de la Neápolis.

Originalmente fue consagrada a la diosa griega Diana, y precisamente uno de «sus sobrenombres» era Ortigia (Ortigya en griego) una isla que sobresale al mar como si fuera «un brazo de la ciudad»  y con una antigua fortaleza. Se comunica con tierra firme por dos puentes de acceso.

Siracusa y la isla de Ortigia cuentan historias pasadas de griegos, romanos, corintios. Cuentan con un patrimonio de bellos monumentos, edificios civiles y religiosos, templos, estatuas, museos, etc y que junto con las Necrópolis rupestre de Pantalica en las afueras de la ciudad le han valido ser nombrado al conjunto como Patrimonio Humanidad de la Unesco en el año 2005.

Hay tal «concentración de sitios por ver» que se necesitan al menos un par de días. Es un sitio demandado y apreciado por los turistas o viajeros (¿o es lo mismo?) y es como el «corazón de ésta ciudad».

Encontramos rincones encantadores desde su preciosa catedral y plaza (Duomo), innumerables palacios o palacetes huellas de un pasado glorioso.

Se pueden recorrer preciosos templos y fuentes (como p.e las conocidas de Aretusa o Artemide),  museos como el del Papiro o el Arkimedeion), un bonito paseo marítimo repleto de sitios para comer y disfrutar de unas bonitas puestas de sol, un castillo-fortaleza (Maniace) e innumerables cafés, restaurantes, tiendas, galerías de arte.

Y como curiosidad puede hasta encontrarse un baño antiguo judío que estaba solamente permitido a mujeres.

Siracusa fue patria de uno de los grandes personajes de la historia y quizás uno de los matemáticos más relevantes: Arquímedes, gran inventor, ingeniero y sobretodo matemático.

Creador del famoso número Π (Pi) (leáse el número 3,1415926535…) En su ciudad bien se le recuerda en un museo que lleva su nombre, Arkimedeion.

Se le atribuye a Arquímedes la frase famosa de «EUREKA» que en griego antiguo significa: ¡Lo he encontrado!. Cuando estaba en su bañera se dio cuenta que el nivel de agua «subía» cuando él entraba y era precisamente la solución que buscaba para calcular «el volumen de un objeto con forma irregular» (en concreto el problema era saber si una corona de oro estaba hecha de oro, o no … y por su volumen se podría saber).
Fue tal la emoción de su descubrimiento que salió disparado a la calle diciendo esta palabra … y ejem ejem … no se dio cuenta y salió …»como Dios lo trajo al mundo».

Nos alejamos del centro de la ciudad y nos vamos a sus afueras a conocer unos restos arqueológicos: Parque Arqueológico de la Neápolis.

En anteriores posts sobre Sicilia visitamos más recintos de este estilo (algo de los que Sicilia puede presumir de tener) para conocer de primera mano el legado griego dejado en la isla. Recordemos que fue la segunda colonia en importancia después de la Isla de Naxos, Grecia. Te lo recordamos en este post: Segesta, Selinunte y Agrigento, la huella griega en Sicilia.

Parque Arqueológico de la Neápolis

Neápolis significa parte nueva de la ciudad. Con el declive de Grecia la ciudad pasó a manos del Imperio romano y se nota esta marcada influencia en algunas partes de la ciudad.  Uno de los principales restos «romanos» están en el Parque, un antiguo Anfiteatro romano que data del siglo II a.C.  

Seguimos dirección al gran Teatro Griego, excavado en la dura roca y con una capacidad para aproximadamente unos 15.000 espectadores (el mayor aforo de un teatro de este tipo en toda la isla) y  con unas vistas impresionantes a la ciudad y al mar.

Quedan vestigios de lo que antes fue «el escenario y la zona de la orquesta». Era el lugar para representar «comedias» pero también contó con una excepción,  el dramaturgo griego más famoso de la época, Esquilo, fue invitado especialmente para representar sus últimas tragedias. Cosas de famosos de la época …

Circundando el teatro podemos apreciar muchas cuevas horadadas y se va siguiendo «la ruta marcada» por el Parque para visitar las latomías, antiguas canteras de piedra de un 1 km de longitud y utilizadas como prisiones o lo que sería hoy día, campos de trabajos forzados.

La Oreja de Dionisio

Siguiendo las pertinentes señales de la “Latomia del Paraíso” vamos en busca de un sitio singular, llamado La Oreja de Dionisio.

Encontramos entonces para nuestra sorpresa una inmensa «oquedad en piedra» que mirándola bien nos podemos imaginar como si fuera una gran oreja y que dentro es como una gran «caja de resonancia». Tiene unas dimensiones colosales, 23m de altura, 5-11m ancho y una longitud de 65m.

El nombre en cuestión (en italiano “Orecchio di Dioniso”) lo acuñó el pintor Caravaggio quién vio cierta similitud entre ésta y nuestro común aparato auditivo. Se dice que «Dionisio» fue un celebre tirano (que eran los que gobernaban por esa época)  que tenia a los prisioneros trabajando en éstas canteras y «de sol a sol».

Se ponía a escuchar lo que decían los prisioneros (no se exactamente el lugar concreto) gracias a la excelente acústica que hay  en la gruta. Como nosotros y Ud. que «seguro es guiri» no podrá evitar susurrar -o hablar- dentro de la gruta para oír el sonido de su voz y el eco que seguro le responderá por cualquiera de los rincones dentro de la gruta.  Una vez descubierto éste «pequeño secreto» nos vamos a visitar otro sitio muy especial.

La falsa Tumba de Arquímedes

Según dicen allí no está enterrado este gran matemático. Siracusa fue su patria natal y el lugar donde fue asesinado por error.

Alguien «adjudico» que estaba enterrado aquí y se quedo como si fuera verdad, pero no se comprobado que sea real. Cierto o no es lugar de peregrinaje habitual de muchos visitantes, que se dejan llevar como nosotros por las leyendas; y de cierta manera le rendimos un merecido homenaje al «padre del número Pi»

Más fotos en FLICKR: 
SIRACUSA, ORTIGIA Y PARQUE NEAPOLIS (SICILIA)

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