Hoy va nuestro post viajero sobre soñadores. Grandes personas que con tesón y fuerza de voluntad pueden hacer realidad sus «sueños», aunque a veces parezcan imposibles. Nuestro protagonista, Justo Gallego Martínez, un héroe anónimo.
La catedral soñada de Justo Él la denomina la Catedral de la Fe …
¿Recordáis ese anuncio de una conocida marca, «Aquarius», que nos hizo conocer la gran proeza de este hombre?
Justo Gallego es una persona de lo más normal y campechana. Su vida iba encaminada a seguir «por la vía religiosa» (aunque no llegó a hacer los votos como tal) en el Monasterio Santa María de la Huerta en Soria. En 1.961 contrajo la tuberculosis y lo enviaron de vuelta a casa, a su Mejorada del Campo, en la Comunidad de Madrid.
Hoy en día cuenta ya con «noventa y algos», y hasta que su cuerpo se lo permita, sigue trabajando por su pasión -y clara obsesión- desde hace más de 60 años, para hacer realidad su soñada catedral. Es un hombre religioso y de gran fe y ésta, su obra, está dedicada a honrar a Cristo y a Nuestra Señora del Pilar.
Inspirándome en distintos libros sobre catedrales, castillos y edificios significativos fui alumbrando el mío propio. Pero mi fuente principal de luz e inspiración ha sido, sobre todo y ante todo, el Evangelio de Cristo. Él es quién me alumbra y conforta y a él ofrezco mi trabajo de gratitud por la vida que me ha otorgado y en penitencia por quienes no siguen su camino.
Justo Gallego
Detalles religiosos de su catedral
Que un hombre solo y casi sin ayuda haya construido este imponente construcción, sin tener planos de diseño, ni estudios de ingeniería o arquitectura es realmente increíble. El dice que «todo está en su cabeza». Utiliza gran parte de materiales reciclados, o los que más fácilmente puede conseguir (p.e sillas de colegios, ladrillos reciclados, muelles, cubos plásticos, restos de todo tipo). Gran parte del presupuesto es de su bolsillo, de alquileres de terrenos familiares o de alguna que otra donación.
Materiales de los más diversos conforman esta peculiar construcción
Nosotros lo visitamos hace unos 15 años, y podías encontrarlo en algún rincón haciendo algo. Como una hormiguita, trabajando incansablemente y poniendo en pie su sueño.
Hoy, sigue en pie su titánica labor. No ha tenido apoyo de ninguna institución oficial, incluida la «eclesiástica» quién debería darle infinitas gracias por su inquebrantable demostración de fe, pero tampoco han podido paralizarle seguir con su sueño.
Lo genial sería darle un «empujón final» a la obra, ver si no hay riesgos y darle la posibilidad a este increíble hombre a que vea su sueño hecho realidad.
La iglesia en conjunto está repleta de detalles y gran original Detalles que recuerdan al modernismo Hecho de cristales de colores diminutos Peculiares columnas que hacen reconocible la catedral de Justo
Gaudí también soñó su catedral … y ahí esta su obra. Ojalá Justo tenga su catedral y lo pueda ver.
© TU HOBBIE TU VIAJE
Un cóctel de hobbies y viajes
Documentales sobre Justo:
- El labriego que creyó en dios, 2000, José Ramón Pedroza, 38′
- Ser Justo. La catedral de todos. 2016, TV Novosti, 27′
- «Great Big Story» (The Lone Man Building a Cathedral By Hand), 2016, Canal YouTube
- Ser justo: la catedral de todos, 2020, RT, 26′