REFLEXIONES
Comments 14

Reflexión sobre «coleccionistas de viajes»

Nuestros viajes no se caracterizan en la actualidad por llegar a ser «tan obsesivos» por llegar a cualquier lugar del mundo, o allá donde lleguen los «low cost»; en algunos momentos si te invade un «virus viajero» e incontrolable cuyos principales síntomas son querer comerte el mundo y cada vez más poseer «más y más países».

Viajas una y otra vez, bajo cualquier circunstancia. Te sientes dominado en cuerpo y alma por eso que llaman espíritu wanderlust, palabra de origen germano que parece que vino para quedarse.

Wanderlust
Fuerte deseo de conocer y explorar el mundo.

No importa donde vayamos, sino que estamos en ruta, de viaje o dispuestos a comernos un nuevo destino

Sin embargo, supongamos que ya estamos infectados por este virus invisible … pero lo hemos aceptado.

Quiero conjeturar más allá en este post, que aunque tengas muchas ganas de viajar y de hecho quieras vivir viajando, ¿donde están los límites de los viajes?

Quieres hacer viajes de forma continuada y sin parar, ver y comer aún más destinos, poner esa bonita «chincheta» en tu mapa particular … pero te has parado a pensar en el tipo de viajes que haces: que no te hacen conocer bien el destino, donde haces miles kms en muy poco tiempo, lugares de patrimonio que no valoras lo suficiente o aquellos destinos que tu también contribuyes a que están masificados.


Expertos de destinos de 1 día

¿Ver una ciudad, población, país … en solo un día …  no nos da esa «certificación de expertos»? Como se diría en inglés, «No way men». Imposible. Inabarcable. Y este tipo de posts encontramos miles; y «expertos», muchos más.

Los viajes pausados no son los más comunes, disponemos de tiempos muy concretos


Como hacer 10 países en 10 días

La variante de hacer muchos destinos concentrados y/o acumular países lo hemos visto en muchos tipos de viajes y viajeros. Pero quién puede tener crédito alguno para hablar de un país con su paso fugaz en un par de días: forma parte de nuestra obsesión por «coleccionar países».

Un ejemplo muy absurdo:
¿Que tal si viajamos por Nueva York, India, Turquía, Sicilia y de paso,
pasarse por Cuba en tan solo unos 10 días? ¿Lo haríamos?

Es una exageración este ejemplo -y seguro que no lo haríamos- pero … y si si. Podríamos tener tal «cacao en la cabeza» que confundiríamos todo el trayecto: el Times Square estaría en la calle 23 de la Habana, la «pasta a la Norma» siciliana la probamos en Turqía o el paseo en barco por el Bósforo no recordamos si fue en Nueva York. Más el cansancio de «saltar como cabras» por el mundo.


Pinta tu mapa BUV

Que bonito resulta ver tu mapa BUV («BuscoUnViaje» o Mapa de países visitados) repleto de sombras de color, señal inequívoca que eres un experto viajero (vamos, todo un explorador). No te da para vivir este subidón pero si te sube el ego a niveles muy altos. Y como curiosidad, al menos cuando lo he hecho, siempre nos dice que soy «El rey de la hamaca» 🙂

Hacemos un BUV imaginario y este es el resultado
Nivel de exotismo máximo, en la India
Marruecos te brinda un mundo completamente distinto a pocos kms de España
La África más negra es toda un viaje de contrastes
Templo menor, de Nefertari en Abu Simbel.
Viajar a lugares como Egipto te transporta en el tiempo


Pero, ¿cuanto realmente puedes viajar?

Para contar países hay que contar con el dinero. Como mucho nosotros podemos hacer un par de viajes importantes al año. Y escapadas de fin de semana y según a donde.

Yo veo que mucha gente viaja -incluso hasta 2 veces/mes- y me maravillo de su capacidad de ahorro, o que cuentan con un trabajo que le pagan muy bien, o que quizás han heredado y/o les ha tocado lotería.

Destinos exóticos no es apto para todos los bolsillos

O simplemente, que sea un viaje remunerado y no lo cuenten como tal.
En este último caso es «normal» que se viaje tanto, de hecho, es una profesión como tantas. Muchos viajeros profesionales se aprovechan de esto para aumentar sus destinos, incrementar sus visitas … pero lo camuflan de «viajes privados» cuando en realidad son viajes pagados.

Por ejemplo, en nuestro caso nuestros destinos en 2018 fueron éstos:

Valle del Baztán, Navarra
Santa Pola, Alicante
Sierra de Madrid
Malta y Gozo
Turquía


¿Contribuyes a la masificación de los destinos?

Me cuestiono últimamente si contribuyo en determinado destino, que este cada vez más masificado. La respuesta es SI y puede, que quizás no tengas otra opción. Los mejores sitios son todos los que queremos visitar.

Torre Eiffel
Mikonos, ejemplo claro de masificación

Pero si podrías cambiar algo en tus viajes para intentar minimizar los efectos en los «destinos más de moda», con pequeños actos como por ejemplo: no ir en temporadas altas, evitar los sitios concurridos (incluso cambiar los horarios) y optar por otros más «alternativos», intentar respetar su patrimonio o incluso, descartarlo como viaje. El mundo es inmenso y siempre hay algo interesante por ver. Son pequeños gestos pero si que pueden ayudar.

Saliendo del centro encontramos otras maravillas, Venecia

Algunos ejemplos de sitios masificados:


Que es más importante ¿el patrimonio, o el «yo pase por aquí»?

La respuesta aunque no te guste es el patrimonio. Ese es el verdadero protagonista, no tú. La historia, valor y conservación la merece ese sitio que ha conseguido perdurar con el paso del tiempo. Así, que mentalizate, tu solo estás de paso.

Imágenes de postureo y de la estupidez humana, la historia aquí no interesa.

Hay una especie de «viajeros» que han proliferado y que publican sus fotos en red de IG (instagammers), y  sobre todo aquellos que banalizan y no respetan estos destinos, minimizan el valor de los lugares a los que viajan. Solo se centran en ellos y en sus egos, con sus interminables poses, tonterías y morritos. Es una verdadera epidemia. Y creo que son los que más atentan contra el patrimonio de la humanidad.

© TU HOBBIE TU VIAJE
Un Cóctel de Hobbies y Viajes

1 comentario

  1. DinkyViajeros says

    Viajar, viajar, viajar. 😣 El 2017 fue un punto de inflexión para nosotros. Llegamos a tener planeados más de 16 viajes (ninguno por motivos profesionales) y resultó tan agotador, que acabamos el año sintiendo que viajábamos casi por “obligación”. 😓 Ahora viajamos menos veces a lo largo del año, sólo cuando realmente nos apetece, pero disfrutamos mucho más. Nos da tiempo a “asentar” los recuerdos de un destino antes de visitar otro. 😉
    Por otro lado, desde hace años practicamos el slow travel pues hemos asumido que es imposible ver todo un país (o una ciudad) en unas vacaciones, por largas que éstas sean… Y no entendemos ese gusto por viajar para hacerse selfies o fotos con posturitas en tal o cual destino, ni la necesidad de retransmitir un viaje en directo a través de las redes sociales, ni el gusto por saber al dedillo el número de países que has visitado…

    Será que somos más viajeros que blogueros. 😜

    Saludos.

    • Si, os entiendo, es como una furia que tienes por dentro que tienes qre viajar a toda costa. Pero gracias a que podemos cambiar el rumbo y elegir que tipo de viajes queremos hacer y que elegir. Siempre nos quedará algo por ver. Es inevitable.

  2. Debo admitir que en mis viajes a veces ha primado más la cantidad que la calidad. Que he sido un viajero bastante rápido, empeñado en querer ver demasiadas cosas en poco tiempo. Que a veces he viajado en plan japonés, sin tiempo para saborear adecuadamente el destino considerado.

    Es decir, puedo entender que haya personas que debido a la velocidad con la que viven pasen de manera fugaz por los sitios que visitan, con apenas tiempo para hacer unas pocas fotos. Pero lo que se ve en la actualidad ya me parece demasiado. Creo que se está obviando el fondo de la cuestión, que debería ser el viaje en sí, al anteponerse a ello el interés del propio viajero. El número de gente dispuesta a pasar por encima de lo que sea para conseguir su objetivo, que suele ser un “selfie” para demostrar en las redes sociales que has estado allí, va in crescendo. Como bien dices, se ha perdido por completo el respeto, pero también la vergüenza y la dignidad. Viajar se ha convertido en un bien de consumo más, un producto más de usar y tirar propio del capitalismo más desenfrenado.

    El alma del viajero actual hace tiempo que se vendió por un plato de lentejas en forma de autofoto. Lamentablemente.

    • De alguna forna todos hemos hecho este tipo de viajes, por ver más, por absrcar más destinos. Pero con el tiempo incluso vas evolucionando a menos es más.
      Quiénes han estropeado este mundo son esas personas de las que hablas: todo por un selfie. Las que tienen malas prácticas, no muestran respeto o sus motivaciones son ajenas a conocer y descubrir el mundo. Gracias por tu opinión.

    • Muchas gracias. Son años viajando y a veces, sufriendo las malas prácticas de personas, que en el fondo, no tienen ninguna curiosidad ni interés en su viaje.

    • Muchas gracias. Supongo que esto nos pasa a muchos que viajamos. Agota ya este mundo de tanta gente que echa por tierra la pasión por los viajes.
      No valoran lo suficiente lo que significa viajar y el respeto que hay que tener.
      Hay que ser más normal, menos egocéntrico y bajar un poco a «tierra».
      Un abrazo.

  3. Genial articulo Maria! Yo soy viajera rápida pero sin caer en barbaridades (o lo mismo si y no lo se) y confieso que lo que más me gusta es visitar sitios poco trillados ya que no aguantó las aglomeraciones. Por ultimo lo de no respetar él patrimonio por la foto de turno debería de estar penado por ley. Un abrazo.

    • Yo cada vez menos me gusta estar un sitio rodeada de gente intentando hacerse la foto. Casi que prefiero abandonar.
      Las personas irrespetuosas con el patrimonio deberían quedarse en casa. No hacen más que molestar e incordiar. Y total, no se enteran ni donde han estado.

  4. Dani says

    Hola,
    Muy acertadas tus reflexiones, en una era en que muchos viajeros sólo buscan la cantidad en detrimento de la calidad y de saborear a “fuego lento” los destinos. Respecto la actitud de los postureos y de lucir modelito en instagram por mi parte no le veo la gracia, aunque por lo que parece está muy de moda y da muchos “likes”. En fin…
    Un fuerte abrazo

    • Dani, mi nivel de tolerancia con este tipo de personas está ya al límite, simplemente no los soporto. Incluso mi marido y yo nos ponemos a imitarlos a ver si se percatan de las tonterías que hacen. Estar rodeados de este tipo de gentes en destinos geniales, les quita brillo y asombro al viaje.
      Yo cada vez viajo más «slow», lo intento al menos.
      Un abrazo y gracias por tus reflexiones.

  5. Cierto es que viajar se ha hecho muy popular y más asequible a más personas. Pero hay tanta gente que viaja y no le importa el viaje en si o lo que esta conociendo, solo la foto de rigor, ese «yo estuve aquí». Con el tiempo les preguntas y no tienen ni idea ni lo que vieron.
    Para mi viajar es otro concepto, es abrirte al mundo, conocer otras culturas, aprender, admirar otras formas de vida y costumbres. Y para ello debes poner atención, dedicarle tiempo, intentar entender el lugar y sus gentes.
    Un saludo y gracias por tu comentario.

  6. Muy de acuerdo con tu post. En la actualidad viajar está de moda, y parece que cuantos más sitios visites, mejor. Además, los lugares están llenos de gente que busca “la foto” y le interesa poco lo que ve. En mi opinión, más vale ver menos cosas y conocerlas más en profundidad que ir a la carrera solo por aumentar la lista de destinos. Al igual que tu, me pregunto como hará la gente para viajar a tantos sitios el mismo año! Mi trabajo no me lo permite, y menos aun mi cartera…Un saludo!

Comentarios

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.