Uno de los sitios más recomendables para visitar en las Highlands es uno de sus castillos más emblemáticos y reconocibles, ademas de ser muy cinematográfico, es el Eilean Donan.

Situada en un pequeña islita por la que se accede por un bonito puente de piedra, se alza misteriosa y bella esta fortaleza sobre el lago Duich. Muy cerca está una población cercana de Kyle of Lochalsh y también hace camino para ir a la preciosa isla de Skye.

Según cuenta la historia fue construido en 1.220 sobre unas ruinas donde se supone vivieron los “pictos”, antiguas tribus que solían dejar sus “dibujos” sobre piedra. También se cuenta que sirvió como refugio al héroe Robert the Bruce en su huida de las tropas inglesas. Siglos después paso definitivamente a manos privadas, al clan MacRae, familia que sigue siendo su actual propietario.

En 1.719 con motivo de las guerras jacobitas recalaron en el castillo unos “46 españoles” quienes lucharon con gran valentía contra los ingleses. Ellos tenían la misión de apoyar a los escoceses en esta causa pero fueron repelidos por los ingleses tras un mes ocupación.

En el interior del castillo se pueden visitar varias estancias de los dueños del castillo, los MacRae que mantienen el espíritu vivo en el castillo donde han dejado innumerables recuerdos de la familia, reliquias de épocas pasadas e incluso lo mejor, son la recreación de su cocina tiempos atrás.

Ha sido ademas muy conocido en el mundo porque se han rodado varias películas, quizás la que más ha llegado es  “Los inmortales”, luego vino “Bravehart”, una de las sagas de 007 “El mundo nunca es ” o “La vida privada de Sherlock Holmes”, entre otras.

Aunque no fuimos con “buen tiempo” (era pleno otoño y el clima alli es muy variable) el sitio en sí mismo es una maravilla, transmite tranquilidad y paz alrededor del lago y nos deja ese halo de misterio que siguen encerrando sus paredes. Desde luego, es un sitio imprescindible.

 

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